¿Su pareja le es infiel económicamente?

Si usted es de las personas que considera que su pareja no debe saber en qué gasta o nunca le ha dicho cuánto es lo que gana realmente, puede estar cometiendo infidelidad financiera. Incluso, estudios realizados en Estados Unidos señalan que seis de cada diez personas engañan a su esposo o esposa en temas financieros.

Las expresiones en este tipo de infidelidades van desde el hecho de negar que se haya comprado un par de zapatos o pedir que todas las entregas que solicita lleguen a su oficina y no a su casa. Según señala CNN en Expansión, los hombres son quienes más gastan en secreto.

En Semana.com la psicóloga Liliana Jara habló sobre el tema y explicó que “cada vez que alguno de los miembros de la pareja miente u oculta información, comete infidelidad y esa regla aplica por igual para la vida romántica, la sexual y la financiera. Es algo muy delicado que puede acabar con cualquier matrimonio”.

Sin embargo, tenga presente que existe una gran diferencia entre esconder fondos o dividir los recursos correspondientes, es decir, que ambos cumplan con sus responsabilidades en el hogar y que lo que “sobre”, cada uno pueda destinarlo a sus gustos pero, de igual manera, tener el conocimiento respectivo.

Las pistas:

Según CNN Money existen algunas formas de actuar y señales que pueden ponerlo alerta sobre una posible infidelidad financiera:

• ¿Es resistentes a tener una conversación sobre finanzas o se vuelve una persona argumentativa y enojada cuando se discute sobre el tema?
• ¿Notó que ha hecho una compra grande y costosa sin haberle hablado o consultado primero?
• ¿Ha encontrado factura de artículos de los que no tenía idea?
• ¿Ha descubierto que tiene o abrió nuevas líneas de crédito y, peor aún, a su nombre?

Las consecuencias:

La más evidente de que esto suceda no sólo es un rompimiento y divorcio, sino también un sobreendeudamiento. Recuerde que las finanzas de una pareja están divididas siempre a la mitad: todos los ingresos, las nuevas deudas y las inversiones; deben ser programadas pensando en el bolsillo de dos personas y sus respectivos proyectos a futuro.

Aunque cada uno puede tener su independencia económica, la pareja debe ser consciente que, por el hecho de estar casados o tener una unión libre, si uno de los dos adquiere una deuda, es como si ambos lo hicieran.

Por eso, esconder dineros o inversiones o deudas, puede acarrear grandes consecuencias para el bolsillo y reputación financiera de ambos: puede implicar el embargar los bienes comunes o los sueldos que reciban, haciendo que la pareja se apriete, aún más, el cinturón.

Otra consecuencia puede relacionarse con la evasión de impuestos o, en caso de que sean puestos los bienes a nombre de alguien más, puede correr el riesgo de perderlos.

Así mismo, existen otras graves consecuencias legales pues, al tratarse prácticamente de la disolución de una sociedad. Según señala Forbes, quien esconde dineros puede ser acusado de ocultar activos y durante el proceso de divorcio deberá presentar una declaración financiera juramentada, que puede llevarlo a grandes pérdidas en un proceso de división de bienes.

Cómo manejar el problema

El sitio web “Get rich slowly” expone un caso similar y aconseja a las personas que pueden estar viviendo una situación similar. Por supuesto, lo primero será confrontar a su pareja al respecto y, con ello, averiguar de dónde se obtuvo el dinero o cuánto puede llegar a deber, si se trata de una deuda.

El segundo paso involucra la realización de un plan de deuda. Y si bien puede que no se trate de su deuda, es una deuda conjunta a la que ambos deberán dar solución. Para ello, pueden pensar en vender los respectivos bienes o, en otro caso, pedir a su pareja que consiga un trabajo extra.

Finalmente, y dependiendo de la magnitud del caso, la pareja puede recurrir a una asesoría financiera, establecer un nuevo presupuesto y establecer nuevas normas financieras al respecto, para el manejo del dinero en pareja.

FUENTE: FINANZAS PERSONALES