Quienes paguen sus haberes en 90 días podrán limpiar su calificación en la central de riesgo y acceder a nuevos créditos. Así consta en la nueva ley.
La Ley de Fomento Productivo, que está vigente desde el 21 de agosto, trae incentivos, remisiones y reglas macrofiscales. Pero también hay otros beneficios relevantes, uno de ellos relacionado a la central de riesgo.
Las personas naturales o jurídicas que tengan créditos vencidos en entidades financieras públicas o privadas, cuyos valores sean cancelados en el término de 90 días, podrán limpiar su historial crediticio.
Así está estipulado en la disposición transitoria decimonovena de la norma antes citada.
El ministro de Finanzas, Richard Martínez, indicó que más de 300.000 personas están en categoría E en el buró de crédito y en la central de riesgos. A ellos, si pagan, se les permitirá que tengan acceso a nuevos créditos.
Sandy Maigon hace tres años obtuvo un crédito en el Banco Nacional de Fomento, se retrasó y su calificación descendió. Finalmente canceló el total de la deuda, pero en su historial quedó registrado el antecedente lo cual no le permite acceder a nuevos préstamos.
Otro caso es el de Juan Vera. Hace dos años contaba con dos trabajos, tenía capacidad para endeudarse y lo hizo con una casa comercial y con una telefónica. Luego se quedó sin empleo, dejó de pagar y dañó su calificación.
Central de riesgo,beneficios y perjuicios
Héctor Delgado, analista económico, catedrático y exgerente de la Corporación Financiera Nacional (CFN), explicó que la central de riesgo es un portal donde instituciones financieras o casas comerciales ingresan para ver el historial del comportamiento en los créditos que se han otorgado a la persona solicitante. Además evalúa al cliente y muestra la información de los últimos tres años. El registro informa “cuándo se quedó vencido, cuánta deuda tiene en el sistema financiero, si pagó al día, si es un cliente totalmente vencido en categoría E o si ya tiene demanda judicial”, señaló el experto.
Federico Morán, director ejecutivo de la Fundación Emprendedores del Ecuador y consultor, agregó que el 30% o 40% de la información que consta en la central de riesgo corresponde al análisis de crédito del sector financiero. El restante pertenece al sector comercial, cooperativas de la economía popular y solidaria, telefonía, entre otras.
Tener una buena calificación en el buró de crédito depende del comportamiento en los pagos. Y eso permite acceder a nuevos créditos; si el cliente no paga su deuda el buró lo castigará con calificaciones que van desde la A hasta la E, junto a una puntuación de análisis de hasta 800 puntos. “Lo que busca la ley es eliminar esas malas calificaciones para que puedan acceder a préstamos y que ese dinero dinamice la economía ecuatoriana”, añadió Morán.
No es malo estar en la central de riesgo, ‘lo malo es no pagar’ Héctor Delgado explicó la forma de calificación. Todos los bancos califican el 30 o 31 de cada mes; si una persona debe pagar el 20 y no lo hizo, esos 10 u 11 días no le van a afectar, pero si llega el siguiente cierre y aún continúa vencida esa cuota, ya serían 40 días. Ese mes sí será reportado a la central de riesgo con un mes de vencimiento. “Estar en la central de riesgo no es malo, de hecho es bueno porque dice que estoy pagando bien, otros bancos ven mi capacidad de pago y me pueden dar un crédito, lo malo es no pagar”, aseguró Delgado.
Quien no ha hecho créditos no existe y para el banco es más riesgoso porque no se conoce a ese cliente. La Ley de Fomento Productivo elimina la mala calificación en el buró de crédito a quienes paguen sus obligaciones desde el 21 de agosto, cuando entró en vigencia la ley, pero hay un condicionante. Si la persona natural o jurídica volviera a presentar valores vencidos, el historial completo de las mismas se mostrará nuevamente en el reporte crediticio y manchará otra vez su calificación. Esto aplica solo con el sistema financiero público y privado, las casas comerciales no entran.
Fuente: El Telégrafo