Por más que usted haya estudiado, por más libros que haya leído, por más que sienta que cualquiera puede hacer un negocio mejor o que es fácil copiar el negocio de otro, jamás podrá entender el significado de un verdadero negocio hasta que realmente usted se haya untado de barro hasta el pelo.
Lastimosamente, por más horas de estudios y de lectura de libros, la teoría no funcionará en lo más mínimo. El manejo contable, el manejo administrativo, tributario, personal, etc., no tiene nada que ver con lo que dice un libro a lo que de verdad tendrás que enfrentarte cuando estás cara a cara con un negocio. Por lo tanto, si quiere saber de negocios, hay que emprender.
¿Ser empleado de una empresa funciona? ¡NO! No funciona, no sirve. Una cosa es tener la visión y el conocimiento de un empleado y otra, muy diferente, es la del dueño de la empresa. Un emprendedor está obligado a tener un periscopio físico y mental, entender cada rincón de su negocio.
Mientras que un empleado, por más compromiso que demuestre, difícilmente podrá tener esa perspectiva; el empleado solo se concentra en su objetivo específico: que le llegue el salario cada quincena, o cada mes (en el peor de los escenarios), pero no tiene una visión 360 para entender de por qué le llega ese dinero sagradamente en las fechas pactadas en su contrato.
Y esto es importante cuando usted emprende:
#1. La humildad será la base de tu prosperidad
Obviamente, existen casos de todos los tipos; sin embargo, la gran mayoría de los emprendedores que conozco y/o con los que he tendido la oportunidad de interactuar y trabajar, poseen una gran capacidad de ponerse en los zapatos del otro, no importa el interlocutor que tenga por delante, lo escuchan y revisan sus necesidades para poder encontrar las soluciones o caminos que se deban desarrollar.
#2. Sale por completo de su zona de confort
Emprender lo saca totalmente de su zona de confort, activa todos sus sentidos en cuerpo y mente, lo mantiene en alerta máxima. Emprender es como volver a la época de las cavernas, sólo que el más fuerte sobrevive. Como una especie de ‘Juegos del Hambre’.
#3. Activa sus relaciones personales
Emprender es el ejercicio de relacionamiento humano más importante, nada es más vital para un emprendedor que activar relaciones de largo plazo, fuertes y duraderas. Las relaciones fuertes y duraderas harán sobrevivir tu negocio por largo tiempo.
#4. Permite valorar las prioridades más importantes de la vida
Un emprendedor entiende que a pesar de las muchísimas dificultades o urgencias del día a día, lo único que prevalece -pase lo que pase-, es su familia o círculo afectuoso más cercano. Por lo tanto, el emprendedor aprende a valorar al máximo los momentos con su familia entregando la máxima calidad posible en el tiempo con sus seres queridos.
#5. Planear es bueno, pero actuar es mejor
Pensar, actuar, revisar, pensar, actuar, revisar, una y otra y otra y otra vez. Es una constante en la metodología ‘Agile o Lean’. Un emprendedor es activación en continuo. Un emprendedor está obligado a tomar decisiones de forma constante, no se queda quieto, no se conforma, entra en un proceso de acción y análisis que le permite tomar decisiones día y noche. Un emprendedor sabe que quedarse quieto es morir.
Mi conclusión es que sería ideal que cada ser humano realmente pueda vivir la experiencia de emprender, al menos, una vez en la vida. De ser posible, debería ser como el servicio militar, de obligación para todos. Generando esta experiencia en cada persona, estoy seguro de que todo funcionaría mucho mejor.
Las personas seríamos más productivas, capaces de entender la problemática del otro poniéndonos en sus zapatos en diferentes situaciones, entendiendo que nada es regalado o nada está por descontado, que el valor del esfuerzo y el trabajo es sagrado. Que creando un emprendimiento es la mejor forma de crear valor y progreso, no sólo para uno mismo o su familia, sino también para su comunidad.
Ser emprendedor/empresario no es nada fácil, debo confesar que hay muchos momentos muy agradables, pero definitivamente hay muchísimos más desagradables. Sin embargo, sé que este proceso me ha hecho un profesional diferente y una persona que no creí que se podría lograr, por lo tanto, al menos una sola vez en la vida, hay que experimentarlo.
FUENTE: FINANZAS PERSONALES