Llega la Navidad, una época de alegría y de tiempo en familia. Sin embargo, muchos son los gastos que debe afrontar la economía de un hogar. Comidas, regalos, algún que otro capricho en las salidas durante las vacaciones de los hijos, algún viaje, etc. La cuenta corriente se reduce mucho en esta etapa con la que se cierra el año y enero puede convertirse en una pesadilla.
Para evitar que la Navidad haga mella en la economía familiar, nada mejor que aplicar el sentido común en cada compra. Pequeños trucos que ofrecen desde la Organización de Consumidores y Usuarios, OCU, para que en estas fechas el dinero no se vaya en objetivos sin sentido. Tips tan sencillos como acudir al centro comercial con una lista para evitar confusiones o comparar precios ayudarán a que la cuenta corriente no sufra en exceso.
Trucos para ahorrar en Navidad: Estos son los consejos de OCU evitar los despilfarros en la época navideña: – Hacer listas para planificar y escalonar. OCU recomienda elaborar 3 listas (alimentación, regalos y juguetes) en las que figure todo lo preciso. Aquello que no aparezca en este compendio no se comprará. También se pueden incluir fechas para escalonar los gastos, aunque recuerda, mientras más tarde
– Comparar es ahorrar. No te quedes con el primer precio que veas, en especial en compras de mayor envergadura como los regalos de los menores. – Huir de los créditos rápidos para evitar problemas de deudas a largo plazo. Algo que también debe aplicarse al pago con tarjeta que puede generar sorpresas indeseables a largo plazo.
– Ojo con los descuentos. En diciembre aparecen sospechosos descuentos, revisa bien los términos y recuerda esta época hay tanta demanda que las tiendas no necesitan rebajar para venderlo todo.
– Valora las compras online. Quizás tarden un poco más pero en internet puedes encontrar buenos descuentos que te permitan ahorrar. Pero recuerda, revisa opiniones de otros usuarios antes de lanzarte a por estos artículos.
– Ojo la decoración. Un gasto en el que muchas veces caen las familias sin percatarse es la decoración del mismo hogar. A veces menos es más y hay que buscar un toque navideño, no que la casa pueda ser vista desde el cielo. Además, las luces del portal o del árbol también pueden suponer un importante gasto en la factura.
– Plantear menús especiales y asequibles. Una importante lección a la hora de planificar la cena de Navidad es comprar con la cabeza y no con el ojo. A la vista del consumidor se presentan numerosos productos muy apetecibles. Pero hay que recordar el límite del estómago y no llevarse a casa más de la cuenta.
Fuente: HacerFamilia