Tener al capital humano trabajando en las mejores condiciones se traduce en mayor productividad y un escenario más favorable para el desarrollo de los empleados
- Lograr el mayor nivel de productividad es el objetivo de empresas y trabajadores.
- Emprendedores, profesionales de Recursos Humanos y trabajadores de todas las áreas pueden trabajar para lograr un clima positivo en la oficina.
- Acciones cotidianas logran un mejor vínculo entre trabajadores, que se traduce en un mejor rendimiento de la empresa.
Desde hace un tiempo que los expertos vienen hablando de la importancia del clima laboral al interior de las empresas. Este se asocia, cuando es positivo, a una mayor productividad y rendimiento tanto de los trabajadores como de las empresas.
A pesar de ello, muchas organizaciones aún fallan en este aspecto, y no trabajan para lograr un clima laboral óptimo en sus oficinas.
¿Cuál es el problema? Que un clima laboral desfavorable limita la existencia de buenos canales de comunicación, y en el largo plazo lleva a que los trabajadores se sientan desanimados, cansados e incluso estresados.
Tan importante se ha convertido el poder desenvolverse en un trabajo con un ambiente grato que cuando no sucede, no hay dinero, ni beneficios que impidan que el profesional comience a buscar nuevos desafíos, perjudicando los planes de retención de talento que tenga la organización. De hecho, se dice que si no se tiene un buen clima laboral se está condenado al fracaso empresarial.
¿Cómo revertirlo? Existen algunas acciones que pueden tomarse.
La importancia de los buenos líderes
La presencia de un liderazgo fuerte puede marcar los límites a los trabajadores, y eliminar los vínculos negativos centro de la oficina. Además, un buen líder puede reorganizar los equipos de trabajo, establecer canales de comunicación y retroalimentación o romper con la rutina.
Estas acciones, a la vista simples, pueden mejorar considerablemente el clima dentro de la oficina y volver a aumentar la productividad.
Políticas claras
Las empresas deben establecer puntos límites, acciones que toleran y otras que no pasarán desapercibidas. Esto debe quedar claro desde el inicio a la compañía, para evitar conflictos futuros.
Los elementos más importantes que dan muestra de cómo se encuentra el clima laboral de la compañía son las tasas de absentismo y rotación, ambos son con casi toda seguridad resultado de que algo se está haciendo mal. Por ello, ante la identificación de un problema al respecto, siempre será positivo instaurar políticas concretas.
Lo que no se debe hacer
Poco ayudan a una buena convivencia las conductas arrogantes de los superiores y los ataques constantes a los empleados, así como la falta de reconocimientos e incentivos por el trabajo bien hecho. Para un trabajador es importante que, si ha realizado bien su labor, se le felicite y si lo ha hecho mal, se le corrija y se le indique cómo mejorar.
Otro elemento que suele alterar el ambiente y provocar conflictos internos es la falta de equidad entre los trabajadores que desempeñan una labor similar, en especial en lo que se refiere a sueldos y beneficios.
Contemplando estos aspectos básicos, todo empleador puede asegurar un buen clima en su espacio de trabajo. Extendiendo la consideración sobre los mismos en el largo plazo podrá, además, mantener dicho clima.
Fuente: Universia.net